Dentífricos

Descripción

La medida para la higiene bucal más importante es el cepillado regular con cepillos de dientes, hilo dental y cepillos interdentales. Mientras que los dentífricos solían tener la función de favorecer la eliminación de la placa mediante el cepillado de los dientes y enmascarar el mal aliento, los dentífricos modernos de hoy en día también son portadores de ingredientes eficaces para prevenir la caries. Reducen la formación de sarro y previenen el desarrollo de enfermedades de las encías. Los agentes limpiadores (agentes pulidores, abrasivos) presentes en los dentífricos facilitan la limpieza mecánica de la superficie del diente gracias al cepillo. Eliminan la placa y pulen la superficie del diente para retrasar la reaparición de la placa. Como agentes de limpieza se utilizan sustancias inorgánicas insolubles en agua, como el CALCIUM CARBONATE (tiza), el bicarbonato de sodio y los geles de sílice (dióxido de silicio amorfo) en concentraciones del 15 al 60 %. Los dentífricos para niños son menos abrasivos para proporcionar una protección adicional al esmalte blando. Para combatir la caries y remineralizar los dientes se utilizan diversos fluoruros (por ejemplo, monofluorofosfato de sodio, fluoruro de amina y fluoruro de estaño). También actúan sobre el metabolismo de las bacterias e inhiben su crecimiento. La remineralización también se ve favorecida y acelerada por el CALCIUM GLYCEROPHOSPHATE, el hidrogenofosfato de calcio y el xilitol. La placa es la causa que origina la caries y la gingivitis (inflamación de las encías). Los ingredientes antibacterianos, como los aceites esenciales y las sales de zinc y estaño, reducen el número de bacterias en la cavidad bucal y, por tanto, retrasan considerablemente la formación de la placa. Varias sales de potasio, así como los fluoruros, la ARGININA y el citrato de sodio son eficaces contra los dientes sensibles. Los tensioactivos como el lauril sulfato de sodio, el lauril sarcosinato de sodio y la BETAINE se utilizan en concentraciones inferiores al 2%. Favorecen la disolución y la distribución de la pasta de dientes en la cavidad bucal y, por tanto, facilitan la eliminación mecánica de la placa, especialmente en los lugares a los que es difícil llegar con el cepillo de dientes. Los tensioactivos también facilitan la incorporación de sustancias poco solubles en agua que forman la espuma que la mayoría de los consumidores encuentran agradable al cepillarse. Los agentes espesantes proporcionan la estructura y la consistencia deseadas a los dentífricos y evitan que los componentes sólidos y líquidos se separen. Las cantidades utilizadas suelen ser inferiores al 2%. Se utilizan, por ejemplo, alginatos, carboximetilcelulosa, hidroxietilcelulosa y XANTHAN. Los humectantes protegen los dentífricos de la desecación y mejoran la estabilidad al frío. Se utilizan en proporciones del 10 al 45 %. Los humectantes más utilizados son GLYCERIN, SORBITOL y Xilitol. Los aromas,aceites esenciales, proporcionan un olor y un sabor agradables. Los aceites aromáticos se utilizan en concentraciones de alrededor del 1%. Las sustancias más utilizadas son los aceites de menta, el mentol y otros aromas básicos como el aceite de anís, el aceite de hinojo y el aceite de eucalipto. A menudo se utilizan aceites de especias y flores como la vainilla, el aceite de canela, el aceite de clavo, el aceite de rosa, el aceite de geranio y las notas frutales para redondear el sabor. Algunos aceites esenciales estimulan la mucosa bucal. Los edulcorantes como la SACCHARIN, el xilitol, el sorbitol, el acesulfamo y la SUCRALOSE sirven para mejorar el sabor de los productos. Las concentraciones bajas (normalmente inferiores al 0,1 %) suelen ser suficientes para conseguir un dulzor agradable. Los conservantes protegen los productos de la contaminación bacteriana durante su uso. Los colorantes permiten una agradable coloración del producto. A menudo se añaden vitaminas o extractos de plantas (menta, árnica, equinácea, manzanilla, hamamelis) como ingredientes activos adicionales y sustancias protectoras.